• Los padres y cuidadores tienen la mayor influencia en el aprendizaje; todas las familias pueden potenciar el desarrollo de sus hijos, con los apoyos y recursos necesarios. 

• Como especialistas en desarrollo infantil, no somos el principal agente de cambio en la vida de un niño, sino que nuestra función principal es facilitar el desarrollo apoyando a los cuidadores. 

• Creemos que la relación entre la familia y el proveedor se caracteriza por el respeto, la confianza, la honestidad y la comunicación abierta. 

• No se debe suponer o esperar que todas las familias tengan las mismas rutinas en las prácticas de crianza de los niños. Por lo tanto, los servicios deben ser dinámicos e individualizados para reflejar las preferencias, los estilos de aprendizaje y las creencias culturales del niño y la familia. 

• Las relaciones y conexiones son la base para el aprendizaje. Los niños necesitan sentirse valorados, confiados y apoyados por los adultos. 

• Los pequeños aprenden a través de experiencias naturales del día a día con personas conocidas, dado que se les permite participar y colaborar a su máximo potencial, con la mínima orientación necesaria. 

• Los niños pequeños también aprenden a través del juego; y el verdadero juego está destinado a ser autoelegido, autodirigido, intrínsecamente motivado, en un estado mental no estresado. 

• Los niños necesitan crecer en ambientes donde se les permita moverse, cantar, observar, discutir, leer, jugar y crear.  

Valores fundamentales